Esto luego de la disposición municipal de prohibir que los tanqueros tomaran agua de un recipiente que está en el sector antes mencionado, por considerar que estaban afectando a la población.
Los dueños de los vehículos cisternas al no tener un lugar donde aprovisionarse, decidieron tomar agua del río y entregarla en los hogares que les piden el servicio, donde informan que deben tratarla con cloro para que sirva para las tareas de mantenimiento y los bañistas.
El agua de río es vendida a 10 dólares.
Reclamo
Alfredo Zambrano, propietario de un tanquero, y que ha provisto de agua por casi 12 años, mencionó que la cisterna donde compraban el agua era legal, pues hace poco tiempo el municipio les extendió un permiso para su funcionamiento, y que el alcalde se la ha tomado con ellos, pues no quiere abastecerles de agua a ningún precio.
"Nosotros vendíamos el agua a sectores como La Fortuna, La Colombia y Canoa que hoy claman por agua.
El transportista denunció que los únicos tanqueros que estarían abasteciéndose de la cisterna de Los Perales, son los que pertenecen al concejal Darwin Hernández.
El edil rechazó las declaraciones, e indicó que la municipalidad está tratando de encontrar solución al problema, pero que la falta de cumplimiento de la EMAPA de entregar agua a la comunidad, y además por la rotura en las tuberías de distribución, no se ha podido dar el servicio.
Insisten en medida
Un grupo de moradores de la parroquia señaló que estuvieron a punto de realizar una medida de hecho, pero que las autoridades les prometieron solucionar el problema, sin embargo ante la falta de ejecutividad de quienes dirigen el cantón, no descartan una protesta en los próximos días hasta lograr obtener el servicio, sea agua potable o del río.