El Gobierno colombiano anunció hoy que implementará un plan para solucionar de inmediato la situación de centenares de mineros de su país y de algunos brasileños, expulsados el domingo de Venezuela.
El ministro colombiano de Defensa, Gabriel Silva Luján, viajó este lunes a Inírida, capital departamental del Guainía, en la zona fronteriza, y se reunió con portavoces de los trabajadores afectados y autoridades de ese territorio del este del país.Los expulsados, entre los que figuran menores y miembros de las comunidades indígenas de la región, trabajaban en yacimientos auríferos del otro lado de la frontera de Colombia con Venezuela, precisó la alcaldesa de Inírida, Marta Zulia Parra.La funcionaria añadió que al menos otros 1.500 mineros están escondidos en las selvas fronterizas.Silva anunció que esta situación será denunciada ante organismos internacionales y será tratada por el presidente Álvaro Uribe en la Cumbre Iberoamericana, que se celebra estos días en la ciudad portuguesa de Estoril.
El ministro reveló que, junto con otras autoridades, se trabaja para implementar un plan de minería comunitaria, se incentivará el turismo en esa región, se colaborará para el retorno de mineros hacia sus lugares de origen y se entregará un subsidio a los brasileños que se encuentran en Colombia.
Algunos de los expulsados relataron a los periodistas que acompañaron a Silva que ayer fueron obligados a salir de Venezuela por efectivos de la Guardia Nacional de ese país, que llegaron a la zona de la explotación "haciendo disparos y obligando a todo el mundo a salir corriendo".
El Ministerio de Relaciones Exteriores y la Agencia Presidencial para la Acción Social y la Cooperación Internacional (de asistencia social)
 cooperan con los mineros en Inírida para paliar su difícil situación y ayudarles en el regreso a sus lugares de origen.
Un censo inicial en Inírida permitió establecer que de territorio venezolano llegaron a esta localidad unos 380 colombianos y 45 brasileños.Las autoridades venezolanas, por otra parte, impidieron este lunes el ingreso a su territorio de una misión colombiana que iba a verificar información sobre otro grupo de personas que supuestamente iba a retornar a Colombia.
Entre los colombianos expulsados figura un grupo de unos 70 desplazados por el conflicto interno en este país.
"Vamos a estudiar cuáles son sus necesidades", explicó por su parte el director de Acción Social, Diego Molano.

Fuente: El Telégrafo