En su discurso de clausura de la cita, Correa afirmó que este "es el mejor momento de la historia bilateral", tras recordar que creció viendo a Perú como un rival debido a sus antiguas diferencias limítrofes, que concluyeron con un acuerdo de paz en 1998.

"Hoy, trabajar como un solo gobierno, reunidos los ministros y presidentes, en un hecho inédito en la historia, nos hace sentir que todos los sacrificios han valido la pena", aseguró el mandatario ecuatoriano.

Correa señaló que se han invertido 200 millones de dólares en los últimos dos años y medio en obras como el tratamiento de cuencas comunes, la protección de la naturaleza y políticas bilaterales de lucha contra la pobreza.

"Falta muchísimo por hacer, pero nuestros pueblos pueden sentirse seguros. Este ambiente fraternal nos llena de esperanza y de alegría", añadió Correa.

Su colega peruano manifestó que "jamás en la historia se ha tenido un trabajo sostenido y constante como se está logrando ahora".

García dijo que ambos gobiernos están superando la agenda que se marcó en Brasilia en 1998, en la firma de la paz peruano-ecuatoriana, porque además de la pacificación ahora están hablando de una asociación estrecha y un pueblo común.

El mandatario peruano se mostró satisfecho de que el proyecto de irrigación Puyango-Tumbes vaya a ser una realidad, según uno de los acuerdos firmados hoy, pues permitirá dotar de agua a 22.000 hectáreas de tierras en ambos lados de la frontera.

Asimismo, destacó la creación de un fondo para proceder con el desminado de la frontera, la utilización de un muelle en la localidad de Sarameriza, y la construcción de la carretera Sullana-Alamor.

García aprovechó para invitar a Correa a una visita de Estado donde pueda ser homenajeado "como hermano por su convicción social" y "este hermosísimo trabajo de constitución de una zona de paz".

Los gabinetes de ambos gobiernos firmaron en Piura la creación de la comisión bilateral para la gestión integrada de los recursos hídricos de la cuenca del río Zarumilla, un intercambio de notas diplomáticas que dan por cumplidas las obligaciones contraídas por Perú en 1998 sobre la rehabilitación de ese canal.

Asimismo, firmaron un programa de acción conjunta de los ministerios del interior y de la policía, un contrato de mejoramiento y rehabilitación de carretera Sullana-Alamor, y un acuerdo entre el ministerio de transporte de Perú y el plan bilateral del transporte.

Por último, García puso como ejemplo de colaboración que su Gobierno estudia pedir la contribución del Ejército ecuatoriano para censar a la población discapacitada en la parte peruana de la frontera, teniendo en cuenta la experiencia de esa fuerza en su país.