Barrera, que ha viajado a la capital española para firmar un protocolo de asesoramiento, afirmó que Quito tiene un gran problema de movilidad y que la ciudad necesita "de manera imperiosa" una inversión en transporte público.

"La estimación es que en quince años sólo se llegue a cubrir la demanda de transporte público en un 50 por ciento", advirtió.

El alcalde quiteño aseguró que la fase conceptual del proyecto del suburbano comenzará de manera inmediata, mientras que espera que la fase de construcción empiece en unos dos años y medio.

Barrera subrayó la importancia de crear una empresa propia de la ciudad que gestione una red integrada de transporte público, motivo por el cual Madrid supone un ejemplo en esta materia ya que cuenta con una amplia red ferroviaria combinada con un sistema de autobuses.

Además, el alcalde de la capital ecuatoriana insistió en que la movilidad es "una política social" ya que "un buen transporte público ayuda a homogeneizar a la sociedad" y también supone la creación de "un espacio educador y de pacificación en la convivencia".

Barrera precisó que Metro de Madrid acompañará al proyecto quiteño a lo largo de todo el proceso y precisó que para muchos ecuatorianos que viven en Quito "el metro de Madrid les resulta familiar", por lo que ya cuentan con un concepto de transporte público desarrollado.