Los comerciantes de comidas rápida que se ubican en la avenida 2 y calle 12 aún no han sido reubicados por el municipio. Paula Barberán, vendedora, aseguró que existe preocupación en ellos porque las ganancias han disminuido. "Lo ganado no alcanza si siquiera para pagar mensualmente 10 dólares al municipio por ocupar la vía pública", dijo. Sin embargo Rubén Moreira, de la oficina de planeamiento urbano, señaló que hay un anteproyecto que contempla reubicarlos en La Poza, pero aún no hay recursos.