En estos horarios, coinciden numerosos usuarios, los buses andan llenos en su máxima capacidad, debido a lo cual es igual que mujeres y niños vayan de pie y apretujados, soportando empujones y pisotones, pero se ven obligados a hacerlo por la falta de otro medio de transporte de costo popular. El estudiante Carlos Mite Pisco, del sexto curso A 2 del colegio nacional Alejo Lascano, manifestó que ya es necesario que en esta ciudad exista otra línea o empresa de transporte urbano para descongestionar estas aglomeraciones, o que en su defecto la Villa de Oro brinde un mejor servicio aumentando la frecuencia de salida de los buses en estas horas pico. Johanna Zavala, también estudiante del quinto curso de ese plantel, comparte el criterio de que los buses de esta empresa, en las horas de mayor demanda de transportación, incrementen la frecuencia, es decir que, si desde su sitio de partida en la ciudadela Parrales y Guale, normalmente salen cada 10 minutos, en los lapsos conflictivos lo hagan cada 5 minutos. De igual manera piensa Rudy León, para quien no sería necesaria otra línea de buses, sino que la existente se preocupe por satisfacer la demanda de la ciudadanía, de un mejor servicio.